Desde su vibrante vida urbana hasta el encanto rural de los pueblos y aldeas del interior y su impresionante costa, Waterford tiene algo para todos los gustos. Waterford, la ciudad más antigua de Irlanda, combina a la perfección lo antiguo y lo moderno. Su colección de pubs, restaurantes gourmet y excelentes tiendas y boutiques conviven con murallas medievales, pintorescas callejuelas adoquinadas y la majestuosidad de edificios históricos que aún se mantienen en pie tras más de mil años.